domingo, 30 de diciembre de 2012

Move on

El 2012 no fue el fin del mundo, al menos no se destruyó como se pensaba. Pero muy en el fondo todos sabemos que se transformó y cambió y que realmente es día a día cuando ocurre esa destrucción.

Lo mismo me fue sucediendo, una de esa transformaciones que tienen que pasar para que pienses que  al fin creces y que más que nunca necesitas una de esas brújulas que te puedan dar una mano. Hoy más que nunca me siento la deriva, un poco ambigua con lo que quiero y hasta podría decirse que triste.

Ha sido un año de esos en que cosas cambian: mi vida cambió una mañana mientras me aseaba en el baño y me desmayé. Mi vida cambió cuando abrí mi e-mail y encontré una propuesta que no pude rechazar. Mi vida cambió cuando respondí una llamada de mala forma y maltraté a quien amaba. Y fueron muchos paso bien dados y otros en falso los que hicieron de este año uno distinto, de esos en los que te dices ¿Será que ya es hora de realmente caminar sin nadie de la mano?

Hoy siendo ya 31 de diciembre estoy muy nostálgica, pensando en cosas que pasaron y que me gustaría volver a vivir, PERO NO, este camino no tiene retorno  hay que aprovechar mientras se puede, mientrs la vida me sigue dando oportunidad de caminar. 

2 comentarios:

Tedel dijo...

Mira el lado positivo, Lizzy. No todos los años nuevos son una oportunidad nueva para tomar una nueva actitud ante las cosas; todos los días, todas las horas, todos los minutos y todos los segundos pueden servir para tomar nuevas decisiones y hacer mejores las cosas.

Te irá bien, lo sé.

Unknown dijo...

Creo que lo importante es mantener la salud.

Conociéndote lo que te conozco habiendo seguido tu blog desde hace años, creo que tu desmayo se debe a que tu organismo te pide maternidad, he sabido de casos de mujeres que así se desmayan y que cuando son madres se les pasó todo.

Tu debes tener sangre extranjera en fuerte conflicto con nuestra raza, por eso ocurren respuestas del organismo como esa. Recuerdo que tengo una tía, hermana de mi madre, que por razones de genética, ella tiene un fuerte encuentro racial entre genes europeos y nuestra auténtica raza Tawantinsuyense, que es muy fuerte y de alto grado, como resultado de la mezcolanza ella nació con una mano más pequeña que la otra, algo parecido con lo que ocurre con una prima de mi amiga, tiene genes del altiplano mezclada con genes de alemanes, ella tiene una oreja mucho más grande que la otra.

He sabido de accidentes genéticos de ese tipo, creo que en tu caso el tipo de accidente genético se relaciona con lo emocional, lo netamente psico-neurológico, de allí tu predisposición a ser profunda y hasta melancólica con alto grado cuando te lo propones.

Espero conocerte pronto, para mí sería un agrado muy exclusivo y honorable.

Te saludo por Año Nuevo, Lizzy, que pases un maravilloso 2013 y que seas MUY FELIZ !!!

César Ignacio.