domingo, 23 de marzo de 2014

PERO


Me pondré a hacer memoria porque me gustan los detalles y si cuento una historia me gusta que los tenga todos.
Esa noche estaba con tu camisa puesta y toda despeinada. Tú solo me mirabas mientras yo hacía el ritual de siempre: pararme, ir al baño, lavarme la cara y regresar a  ordenar todo lo tirado aun sabiendo que tendríamos mucho más rato por estar ahí, mientras te quedabas mirando al infinito cabeza arriba.
Esa noche rompiste el ritual y te pusiste a fumar como nunca, no sabía que fumabas, y solo te mire y  dije:
-          ¿Qué cambió?
-          -  Nada , dijiste escondiendo el rostro
De la nada, caminé hacia la pregunta:
-          ¿Me amas?
-         
-          Sí nos amamos tanto como parece, ¿por qué no podemos estar juntos?
-          Nos amamos mucho, es verdad, pero – te detuviste-
-          Pero, esto no tiene arreglo.

Y lo decía mientras señalaba mi propia cabeza.





No hay comentarios: