Hace más o menos un año, cuando todavía me encontraba en tercer ciclo de vida universitaria, mi profesora de redacción uno señaló algo muy interesante acerca del lenguaje, acerca de las palabras: “ con el tiempo las palabras se desgastan, y por qué, porque se usan tanto que resultan comunes y simples: su significado es monótono y hasta aburre”.
Con ello la Dra Nancy Salas( mi profesora) quiso darnos un explicación y a la vez una súplica. Quiso que entendiéramos que las palabras, que en algún decían mucho, iban perdiendo ese “ brillo” con el tiempo se volvían simples, por ello como redactores debíamos encontrar nuevas palabras que no estén tan “desgastadas”, lo que tampoco quería decir que utilizáramos palabras grandilocuentes, pero la cuestión era no caer en el desgaste.
Todo ello me hizo pensar, no tanto en mi manera de utilizar las palabras al momento de redactar, sino que a veces usamos tanto una frase que se desgasta, pierde el brillo, y hasta el verdadero significado.
Particularmente, me refiero a una frase muy usada, y que alguna vez hemos dicho sin querer queriendo, es el famoso TE AMO. Sí, es esa frase tan usada, tan dicha, tan ...
Decir TE AMO significa mucho para cualquier persona, aunque para algunas esa una de frasecitas comunes que se tiene que decir a falta de otros significantes. El punto es que muchas personas tratamos estas palabras con pinzas, por así decirlo. No lo decimos hasta estar seguros del significado, y que ese significado sea idéntico a lo que sentimos o pensamos, claro que eso depende de la persona. La persona se asegura que al decir eso será “maravilloso” y único.
Hay un detalle que no se ha tomado en cuenta. Decir te amo, es como decir GRACIAS o decir esta bien, porque desde el punto de vista lingüístico es una frase más compuesta por un verbo y un .... Entonces, viéndolo desde ese punto me planteo una duda ¿ en algún momento se desgastará por ser tan usada?
Tengo un pequeño esbozo de respuesta ante esa pregunta: creo que no se desgastará con el tiempo, creo que ya se desgastó. He escuchado a tantas personas decir aquella frasecita, y no necesariamente me la dijeron a mi, sino que se lo escuché decir a otros con tanta simplicidad, como si fuera cualquier cosa, cuando muchas personas no logran siquiera imaginarse pronunciando esto.
Ahora le puedes decir te amo a tus amigos, a tu vecino o hasta a tu mascota, y no del modo romántico y sentimental como es interpretado, sino como una forma más de habla.
Me pasó que una vez hice algo así y mi novio me reclamó y me hizo recordar que fue muy difícil para mi decir aquella frase. Con el tiempo la utilicé con tanta frecuencia cuando me dirigía a mi novio que ahora en cualquier conversación que tengo con el se me hace obligatorio decirlo. Sé que está, que quizás estoy equivocada, pero de algo si estoy segura, la gente ya no tiene conciencia de lo que dice, y en un tiempo más no tendrá conciencia de lo que siente.
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