sábado, 12 de mayo de 2007

odio



El verano por su calor asfixiante y porque muchas veces no basta con tomar un refresco frío para acabar con. Lo odio porque me hace sentir ganas de arrancarme la piel y convertirme en un ser insensible.

El color rosa, porque es significado de las ilusiones más triviales y frívolas de este mundo. Lo odio porque mis ojos se desesperan al tenerlo frente suyo, siento que mis pupilas se rasgan ante su presencia.

Que me pregunten qué me pasa cuando me ven triste. Porque mi cara y mi semblante es así la mayor parte del tiempo, sobre todo cuando no duermo bien.

Comer tallarines con arroz, porque el tallarín es TALLARIN. Lo odio porque el arroz lo único que hace es aumentar las calorías y generar una indigestión.

La música de los supermercados, porque reta a nuestra mente y sigilosamente te dice “eres un bruto” con su melodía hecha para cerebros huecos y mentes en blanco.

Los besos apresurados, porque un beso debe causar satisfacción no cansancio.

Los periódicos chicha, porque representan, en cierto modo, la bajeza de los peruanos, el desarraigo y la traición a la patria. Los odio porque manifiestan el ingenio mal usado del peruano.

Odio mis pies. Los odio porque representan no un defecto, pequeñez , sino el recuerdo de una torpeza mía, una cicatriz que me recuerda que la psicosis puede convertirte en idiota y malograrte el cuerpo y el alma.

Odio las sandías, porque no tienen sabor. Las odio porque son las favoritas de mamá y porque cuando las engulle me obliga a hacerlo junto a ella aun sabiendo que su falta de sabor me repugna.

Odio SU hipersensibilidad, porque a pesar de que lo hace imperfecto, y eso me gusta, hace que tenga que pedir disculpas cuando no debería hacerlo. Odio eso, porque hace que ÉL tenga un defecto muy similar a uno de los míos, porque hace que parezca un niño malcriado en vez de un hombre de 26 años.

1 comentario:

Anónimo dijo...

T dedico un aplauso... por tener razones para odiar ciertas cosas...
A mi me sucede q muchas veces las odio, pero sin razones...
algunos dicen q eso es infantil...
yo creo q es el corazon el q me da las razones...